viernes, 10 de agosto de 2012

ANTIGUO HOSPITAL DE JORNALEROS

La Glorieta de Cuatro Caminos se encuentra ubicada en la zona norte de Madrid. El nombre proviene de haber sido un cruce de caminos: Camino de Francia, actual calle de Bravo Murillo, camino de Aceiteros actual Avenida Reina Victoria, el Paseo de Santa Engracia que fue trazado en 1859 y el paseo de Ronda actual  calle de Raimundo Fernández Villaverde.
El edificio que traemos a estas páginas, es posiblemente uno de los edificios  que junto al antiguo Palacio de Comunicaciones, más destaca en la arquitectura madrileña, pero que al quedar fuera de las rutas turísticas, pasa desapercibido al gran público.

Antiguo Hospital de Jornaleros en la actualidad
A mediados del Siglo XIX, estos terrenos no eran más que un descampado con escasas viviendas al quedar fuera del Plan Castro del Ensanche de Madrid.
La Glorieta fue el punto de entrada a Madrid de las aguas canalizadas del Canal de Isabel II. En 1902 se decide denominar a la glorieta, Plaza de Bravo Murillo, en 1917 se la denomina como glorieta de Joaquín Ruiz, en 1931 como Glorieta del Catorce de Abril, pasando a denominarse Glorieta de Cuatro Caminos en el año 1940.

Glorieta de Joaquín Ruiz antes de 1920, la fuente procedía de la Puerta del Sol
         La necesidad de atender gratuitamente a los jornaleros enfermos de la provincia y ante la falta de recursos públicos, llevó a Dolores Romero y Arano, viuda del empresario ferretero Francisco Curiel y Blasi a crear en el año 1906 un Hospital que paliase los problemas de asistencia médica. Para llevar a cabo  su proyecto, crea una sociedad benéfica dedicada a la consagración de San Francisco de Paula.
Para la construcción del Hospital, Dolores Romero solicita a los arquitectos Antonio Palacios y Joaquín Otamendi el diseño del mismo. El Hospital se construirá en una gran manzana casi cuadrada, ubicado en las afueras de Madrid, propiedad de la viuda. El terreno se encontraba en Maudes, un barrio cercano al Hipódromo de la Castellana. La  entrada a la capilla se haría por el Paseo de la Ronda, actual calle de Raimundo Fernández Villaverde.

Hospital de Jornaleros año 1913, cruce de las calles Maudes y Alenza
Antes de analizar las características mas destacadas del Antiguo Hospital de Jornaleros, creemos oportuno conocer un poco a sus creadores para entender el diseño del nuevo edificio.

Entrada del edificio por Maudes
Antonio Palacios nace en O Porriño provincia de Pontevedra en el año 1874. Su familia materna era propietaria de unas canteras de granito en Galicia, es de suponer que esta circunstancia influyó a la hora de elegir la piedra para la construcción de sus edificios. Estudió arquitectura en Madrid y su primer proyecto en la capital fue el Palacio de Comunicaciones, en colaboración con Joaquín Otamendi Machimbarrena.
Antonio Palacios era considerado como una persona sencilla, amable y religiosa nunca tubo apego al dinero y tenía una gran capacidad imaginativa.
Su sencillez contrasta con los calificativos que recibían sus obras a las que se las describía como brutalistas y desproporcionadas, por sus concepciones arquitectónicas y por el tratamiento que otorgaba a los materiales de construcción.
Casi toda su vida la pasó en su modesta casa de El Plantío en Madrid, donde falleció en el año 1945, casi ciego y olvidado, acompañado de su esposa Adela Ramírez. Fue enterrado en la Sacramental de San Lorenzo de El Escorial y en 1976 sus restos se trasladaron a O Porriño.
En Madrid, sus construcciones más importantes serán el Palacio de Comunicaciones, el Hospital de Jornaleros de Maudes, el Banco del Río de la Plata y el Círculo de Bellas Artes. En Galicia, el Teatro Rosalía de Castro en Vigo, el Ayuntamiento de O Porriño en Pontevedra, el Templo Votivo del Mar en Panxón Pontevedra y la Iglesia de la Veracruz de O Carballino en Pontevedra.
Para Antonio Palacios, todo edificio era imprescindible que se integrase en el entorno en donde se pretendía ubicar. Viajó constantemente para conocer la arquitectura nacional, fue un activo defensor de la conservación de arquitecturas gallegas desconocidas. Defendía firmemente su afirmación de que nuestro pasado sigue siendo nuestro futuro.
El escaso desarrollo tecnológico de la época y la preocupación del arquitecto por la artesanía y los oficios tradicionales, le llevaron a definir un estilo basado en el proceso constructivo artesanal y a colocar la piedra directamente, sin desbastar ni ornamentar.
Para Antonio Palacios, la piedra era esencial para reconocer la grandiosidad de un edificio, defendía el empleo de los materiales locales y su reutilización, como apuesta por la identidad de los pueblos y para el saneamiento económico de las obras.

Paseo de Ronda año 1916, el Hospital ya está terminado y la zona urbanizada

Raimundo Fernandez Villaverde, antiguo Paseo de Ronda
           Los Otamendi son una familia de ingenieros y arquitectos formada por cuatro hermanos: Joaquín, Miguel, Julián y José María, quien junto a Julián creó en 1918 la Urbanizadora Metropolitana, adquiriendo terrenos en la zona de Cuatro Caminos, lugar al que ya llegaba el Metro, construido por su hermano Miguel. En 1936 Julián y José María fundan la Inmobiliaria Metropolitana y construyen el edificio Lope de Vega en la recién inaugurada Gran Vía. Posteriormente las actuaciones inmobiliarias de importancia se producen en el entorno de la Plaza de España, donde levantarán el Edificio España, rascacielos de 28 pisos realizado con estructura de hormigón armado. Al año siguiente superaron su anterior reto al construir la Torre de Madrid, con 30 pisos, que le convertían en el más alto de España en su tiempo.
Joaquín Otamendi Machimbarrena, nació en San Sebastián en 1875 y fallecido en Madrid el 11 de junio de 1960.
Contribuyó con sus numerosas edificaciones a dar carácter moderno a Madrid, donde ganó, junto con Antonio Palacios y el ingeniero Ángel Chueca el concurso abierto para la construcción del Palacio de Comunicaciones en la plaza de Cibeles.
Entre 1908 y 1919 Joaquín Otamendi y Antonio Palacios llevan a cabo la construcción del Hospital de Jornaleros de Madrid y en 1918 realizan la sede del Banco Río de la Plata, luego propiedad del Banco Central y desde 2006 sede del Instituto Cervantes.
Participó con sus hermanos en la construcción de los dos edificios más emblemáticos de la Plaza de España. Como arquitecto conservador de la Dirección General de Correos y Telégrafos, construyó diversos edificios dedicados a este servicio entre los que destaca el edificio de Correos y Telégrafos de La Coruña.
No cabe duda de que Dolores Romero Arano, tenía claro quien eran los mejores arquitectos para llevar a cabo su proyecto para levantar el Hospital

Aprovechando la amplitud del espacio, la luz y los vientos saludables de la zona, Palacios y Otamendi diseñan un edificio basado en el modelo de las cárceles españolas y en el esquema tradicional de los hospitales del siglo XVI. El Hospital queda constituido por cuatro naves dispuestas en aspa que giran en torno a un patio con una fuente en el centro, este diseño posibilitaba la iluminación, ventilación y se reducían los recorridos. El Hospital quedaba rodeado por un muro.


Distribución en planta del Hospital de Jornaleros
En la memoria constructiva se definen cinco tipos diferentes de piedra a utilizar para la construcción: La caliza, el granito, la pizarra, el mármol y la piedra silícea.
En el edificio, todas las piezas pétreas que constituyen el plano principal de las distintas fachadas y los diversos elementos de las mismas, salvo las balaustradas, se realizan en piedra caliza. El muro perimetral y los diversos muros de mampostería de los jardines, están construidos también con piedra caliza. La piedra utilizada procedía de las canteras situadas en las proximidades de Morata de Tajuña, que junto con las canteras de Colmenar de Oreja, han suministrado piedra para gran número de edificios de Madrid.

Caliza, granito, pizarra y mármol algunos de los materiales empleados en el Hospital
Los paramentos del edificio se construyen a base de piedras con acabado tosco de las superficies vistas y almohadillado en las superficies de contacto entre piedras, con este sistema de construcción se abarataban en gran medida los materiales.
El granito se empleó para las columnas y escaleras. El granito procedía de la Sierra de Guadarrama, concretamente de las canteras del Berrocal. En las proximidades de Bustarviejo.
La pizarra, solo fue empleada en la cubierta de la iglesia, posiblemente de procedencia gallega debido al amor de Palacios por su tierra y sus recursos naturales.
El mármol se utilizó en los alféizares de la fachada a la calle Maudes y portada principal de la iglesia. El mármol sin poder confirmar, posiblemente procedía de las minas de Macael en Almería.
Para los cimientos, se empleó hormigón de piedra de sílex extraído en la zona de Vicálvaro.
Si observamos la parte superior del edificio, localizaremos paneles cerámicos, que recorren el nivel superior de las fachadas en todo su perímetro, y un mosaico de azulejos, que revisten las enjutas en los arcos de las fachadas.


Detalle de los mosaicos del Hospital
Los paneles cerámicos están constituidos por azulejos denominados gota de agua de muy diversos colores, enmarcados por un cordón en altorrelieve con una pieza semiesférica en sus esquinas. Palacios, también utilizó esta técnica en la decoración de las fuentes.
Las piezas originales fueron elaboradas por Daniel Zuloaga en San Juan de los Caballeros en la provincia de Segovia, empleando las arcillas rojas de la zona, ricas en óxidos de hierro. Para la restauración del edificio, se utilizaron cerámicas en la localidad de Humanes utilizando barro de Valdemorillo.
La técnica del mosaico de azulejos, fue difundida en España por Gaudí, y consiste en utilizar fragmentos de azulejos cortados irregularmente. Palacios para ahorrar en materiales como era su costumbre, empleó piezas sobrantes de las cerámicas interiores.


Detalle de los azulejos gota de agua
El objetivo del Hospital era alojar todos los servicios correspondientes a un hospital de jornaleros, para 150 camas, en que éstos recibirían la medicación y cuidados necesarios desde su ingreso hasta su completa recuperación.
El Hospital incluía la iglesia y dependencias de la comunidad, el pabellón médico-administrativo y de servicios generales, los cuatro pabellones de enfermos con sus anejos, el pabellón de aislamiento, la sala de reconocimiento y pequeñas operaciones, las galerías de comunicación y escalera, y el depósito de cadáveres y autopsias.
Los patios y jardines hacían del conjunto un lugar agradable, lo que aportaba unos reconfortantes efectos terapéuticos en los enfermos. A los patios se añaden las galerías de comunicación completamente abiertas, con objeto de favorecer la ventilación.
Finaliza su construcción en 1916, entrando en funcionamiento en 1917 administrado por la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios. En 1918 recibe el premio del Ayuntamiento y en 1924 la administración del Hospital se adjudica a las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paul.

Antiguo Hospital de Jornaleros

El Hospital es incautado por las Milicias Populares el verano de 1936 para cubrir las necesidades sanitarias de la guerra civil. Durante la contienda, recibe el nombre de Sanatorio de Milicias Populares y funciona como hospital de sangre. En 1939 se convierte en Hospital Militar de Urgencias, debido a la destrucción del hospital de Carabanchel.
En los sesenta comienza el declive del Hospital, cerrándose en 1970 ante la imposibilidad de la fundación para su reactivación, y comienza entonces inexorablemente su decadencia y abandono.
El abandono convirtió el inmueble en un almacén de chatarreros y lugar donde se refugiaban los marginados. Esta situación provocó su rápido deterioro. En el Plan de Reforma Interior del Antiguo Ensanche de 1972, el Hospital es catalogado como edificio o conjunto arquitectónico a conservar, acogiendo su primera protección como Bien Cultural y Arquitectónico.
En 1974 el patronato de la fundación declara que no dispone de medios económicos para la rehabilitación, defendiendo que al estar declarado Bien de Interés Arquitectónico no podía ser vendido ni derruido. En 1976, la Dirección General de Patrimonio incoa un expediente para declarar el edificio Monumento Histórico Artístico.


Patio central antes y después de la restauración
Se suceden varios expedientes a favor y en contra de la conservación del edificio hasta que en el año 1979 es declarado Monumento Histórico Artístico de carácter nacional imposibilitando su demolición. Con el lema “Salvad Maudes”, surge una fuerte movilización vecinal, que apoya la conservación del inmueble.
La Comunidad de Madrid compra en 1984 el inmueble por 234 millones de pesetas, para la instalación de la nueva Consejería de Política Territorial de la Comunidad de Madrid. La iglesia y sus dependencias quedaron excluidas de la compra y hoy en día siguen perteneciendo a la fundación.
Se acometen las obras de rehabilitación y restauración del edificio para su nueva configuración como sede administrativa. Las intervenciones cuidaron los aspectos originales más representativos, se respetó el contorno del edificio, la unión espacial de las antiguas salas de enfermos y su relación con galerías y jardines.


El antiguo Hospital en proceso de restauración
La rehabilitación del conjunto es llevada a cabo por un equipo de expertos dirigido por Fernando de Castro López Villarino. Las labores para rescatar el conjunto, fueron de diversa índole. Por un lado la contaminación atmosférica del tráfico viario de la zona, así como del incremento de la actividad industrial, causaron el deterioro de las piedras.
El 23 de septiembre de 1986 se produce la reapertura del edificio como Consejería de Política Territorial de la Comunidad Autónoma de Madrid, posteriormente dedicado a ser lugar para la Consejería de Obras Públicas, Urbanismo y Transporte. La rehabilitación del edificio superó el doble del coste de compra. Ya en el año 1997 el conjunto fue incluido en el catálogo de edificios protegidos con el grado de protección especial en el Plan General de Ordenación Urbana de Madrid, de esta forma se salvaba de posibles reformas que afectaran a sus valores históricos y artísticos.
Las labores de conservación no acabaron en estas fechas, ha sido necesarias labores de limpieza de fachadas a lo largo de los años para conservar el edificio y que finalizaron en 2008.

Detalles de las vidrieras de la cúpula de la iglesia
Desde sus inicios el Hospital disponía de una Iglesia aneja. Por orden expresa de la viuda Dolores Romero Arano, Palacios diseña una Iglesia en el interior del recinto. Se accede a la misma por el Paseo de Ronda actual Raimundo Fernández Villaverde.
Destacan las vidrieras policromas de la capilla, elaboradas por la prestigiosa casa Maumejean.

Como ya hemos indicado, el antiguo Hospital de Jornaleros, se construyo en las inmediaciones de Maudes que fue una aldea madrileña, perteneciente al municipio de Chamartín de la Rosa. Estaba localizada en las proximidades del solar que ocupan en la actualidad los Nuevos  Ministerios.

Colonia Maudes finales de los años 60 del pasado Siglo

Al Sur del Hospital, estuvo la colonia de casas baratas de Maudes, construida en los primeros años de la década de los treinta entre Raimundo Fernández Villaverde, Alenza, Maudes y Alonso Cano. Eran edificaciones de tres plantas, con jardín  y calles interiores para una cooperativa de Ayudantes de Ingeniería y Arquitectura. Desapareció en fases sucesivas en los años setenta y ochenta para levantar los edificios Géminis.


Cartel publicitario de la colonia
Si observamos el cartel publicitario de la Colonia, todavía la Glorieta de Cuatro Caminos se denominaba Glorieta de 14 de Abril.
Si pensamos que el tema de la especulación del suelo es un tema de nuestros día estamos muy equivocados, recordar que la Inmobiliaria Metropolitana había adquirido terrenos en la zona del actual Cuatro Caminos en los arrabales de Madrid, pero ojo, la primera Línea de Metro llegó a Cuatro Caminos en 1919.
Para llevar a cabo la construcción de la primera línea de Metro, el 24 de enero de 1917 se creó con un capital de diez millones de pesetas la  Compañía Metropolitano Alfonso XIII.

En 1919 la Compañía Urbanizadora Metropolitana, propietaria asimismo, del Ferrocarril Metropolitano de Madrid, planificó una operación urbanística de claro carácter especulativo que consiguió del Ayuntamiento el permiso de sobrepasar las alturas máximas contempladas en las ordenanzas del Plan Castro, debido a su situación limítrofe. En la zona se comenzaron a edificar bloques de viviendas de hasta 25 metros.
Uno de los emblemas de la Compañía Urbanizadora Metropolitana en la zona, fue la construcción entre 1919 y 1923, de una serie de bloques denominados Titanic, en memoria del famoso buque hundido en 1912.

Construcción de los Titanic, a la derecha las cocheras de Metro y al fondo la Glorieta.
Esta versión  del Titanic la componen una gran mole de diez casas conocida bajo el mismo nombre e inspirada en el poderoso perfil de aquel navío. A 35 metros de altura, los áticos de sus diez casas de once plantas imitan a las chimeneas del trasatlántico y la manzana toda comparte con aquel enorme buque su majestuoso porte, desplegado a lo largo de una línea de cornisa de más de 200 metros, sobre la avenida de la Reina Victoria.
Como si se tratara del famoso buque, el Titanic madrileño, no ha podido resistir intacto el paso de los años. Ya ha desaparecido su famosa sala de baile que se encontraba en el centro de la manzana. Tenía 32 metros en su fachada y contuvo el teatro Roncero y, durante setenta años, el Cine Metropolitano, transformado posteriormente en sala de bodas y banquetes, Lord Winston. La sala, que llegó a tener 1.500 localidades y varios escenarios entre sótano y terraza.


Edificios Titanic en la actualidad
Su derribo fue impugnado por el Colegio Oficial de Arquitectos, que consideraba cualquier modificación de la estructura o la morfología del Titanic una agresión contra la historia de la arquitectura madrileña, pero todo en vano, al igual que el Titanic se elevó majestuoso fruto de una operación especulativa, parte de su estructura sucumbió igualmente ante la especulación del terreno y ahora podemos observar la silueta de un Hotel bastante integrado en el conjunto de los Titanic.


Antigua Colonia de Maudes

Vistas aéreas del antiguo Hospital

Año 1912 la  Glorieta de Cuatro Caminos sin fuente, a la izquierda calle de Bravo Murillo dirección Plaza de Castilla

Raimundo Fernández Villaverde

Actual Glorieta de Cuatro Caminos

 Los que habitualmente pasean ó circulan en coche por la zona, recordaran el scalextric montado en la Glorieta de Cuatro Caminos para dirigir la circulación y que se mantuvo entre los años 1969 y 2005.

Desmontaje del scalextric de C. Caminos año 2004, a la derecha los edificios Titanic










19 comentarios:

  1. Entrañable imagen....tenía enfrente de mis ojos ese hospital cuando salía del colegio en la calle Cicerón esquina C/Artistas. Cuando había tiebla casi no podía distinguirse. También jugaba con mis compañeros de clase al salir por la tarde, por las calles que rodeaban al edificio. Cuatro Caminos, mi barrio, ¡cuantos recuerdos!. Gracias

    ResponderEliminar
  2. ¡que cantidad de recuerdos! he nacido y vivo en la calle Maudes, y ver estas fotografias y leer su historia me traen muchos recuerdos de mi infancia. Pasear por la Colonia Maudes cuando yo era pequeña era lo mejor que me podia pasar cuando salía del colegio Joaquín Sorolla en la calle María de Guzmán. Siento que vivo en el mejor barrio de Madrid, aunque ya ha cambiado mucho.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo también he ido al colegio Joaquín Sorolla y he nacido y vivido en Alonso Cano.muy buenos recuerdos

      Eliminar
    2. Yo también he ido al Joaquín Sorolla. He nacido y vivido en Alonso Cano. Qué recuerdos. Soy de 1947

      Eliminar
    3. yo tambien soy de la colonia hotelillos maudes y fue al san juan bosco calle dr bobillo. Ese barrio es mi imfancia

      Eliminar
  3. ana carranza con que maestra esavas en el ciceron

    ResponderEliminar
  4. Me ha gustado tu post y lo he puesto en mi blog http://rincondeoscariglesias.blogspot.com.es/2015/10/recorriendo-madrid-antiguo-hospital-de.html INVITO A TODOS A VISITAR, ADEMÁS DE ESTE MAGNIFICO BLOG, POR SUPUESTO, GRACIAS.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias, yo también soy de Maudes desde los Tres años viví allí hasta hoy ( mi familia vive allí)estoy en UK �� y este artículo me alegra el día. Gracias.

      Eliminar
  5. Hola Isabel:) yo también fui al Joaquín Sorolla.Aun recuerdo aquel brik de leche en forma de pirámide que nos daban en el recreo ahhhh cuantos recuerdos:). Yo también viví en Maudes en el número 62

    ResponderEliminar
  6. Yo jugaba al Ping pong todos los fines de semana en un hotelito que era de la OJE

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo tambien jugaba al ping pong en la oje esquina manuel cerrada ponzano, al lado de ese cuarto estaba la tv en blanco y negro, yo vivia en manuel cerrada y pase toda mi infancia y juventud en la OJE en el hotelillo y probablemente nos hemos visto, tambien estuve en campamentos. Yo soy del barrio de los hotelillos

      Eliminar
    2. chalet de la OJE . yo tambien jugue en ese chalet, habia una tv en blanco y negro en la habitacion vecina , entrada por manuel cerrada esquina a alenza, seria por 1966

      Eliminar
    3. yo tambien, el chalet era esquina manuel cerrada y calle ponzano

      Eliminar
  7. Extraordinario post con mucha información, no sólo del edificio si no de la zona. Muchísimas gracias y enhorabuena!

    ResponderEliminar
  8. Tengo mucho interés en saber como era el entorno de santa engracia con maudes en el año 1937 ya que naci en ese entorno si teneis alguna fotografía lo agradeceria

    ResponderEliminar
  9. Wow, muy interesante. Yo vivía allí y mi hermana aún vive en el mismo sitio frente al hospital. No sabía más q algunos detalles históricos de la zona, muchas gracias, me alegra mucho que hayan compartido este artículo conmigo.

    ResponderEliminar
  10. vivi en los hotelillos desde 1958 al final por el 75, fuimos de los ultimos en irnos, mi familia vivia alli desde el 53

    ResponderEliminar